viernes, 25 de abril de 2014

Cuando seamos mayores

Tengo casi setenta y cinco años, vivo sola en mi casa, la misma con la que estaba con mi marido, la que dejaron mis dos hijos cuando, pero casaron. siempre he estado orgullosa de mi autonomía, pero desde hace un tiempo ya no es como antes, sobre todo cuando pienso en mi futuro. Aunque todavía me dicen <<si yo fuera como usted a su edad...>>salir a comprar y ocuparme de la casa me cansa cada vez más. Entonces pienso: <<¿Cual será mi futuro?>>. Cuando era joven la respuesta era sencilla: con mi hija, con el yerno, con los nietos. Pero ahora, ¿que se puede hacer? Las casas son pequeñas y en la familia todos trabajan. También ahora la respuesta es sencilla: el asilo. Con frecuencia oigo decir:<<Lo ingresamos en un buen asilo, por su bien >>. Tal vez son sinceros siquiera en unos, pero ellos no viven ahí. Ni si quiera es un <<mal menor>> pero necesario. No creo que una institución sea la respuesta para quien está un poco mal y, sobre todo, está solo. Encontrarse derrepente viviendo con personas desconocidas, no queridas y no elegidas ¿es realmente una manera para vencer la soledad.


     


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